Cerca de 720.000 vehículos pasaron gratuitamente a través de los peajes de la red vial primaria del Guayas, para impulsar el turismo y la reactivación económica

La Prefectura Ciudadana del Guayas logró el objetivo: El paso por el puente Churute, en la vía Puerto Inca-Naranjal, se dio con fluidez y seguridad durante los cuatro días del feriado por el Día de Difuntos y la Independencia de Cuenca. El puente Bailey que reemplaza a la estructura de hormigón afectada por un atentado terrorista soportó el intenso tráfico, mientras un operativo garantizó el paso seguro.

Como parte del Plan Integral de Seguridad y Movilidad, la Prefectura mantuvo desplegados operativos conjuntos con la Policía Nacional en puntos estratégicos, apoyados por el Sistema de Monitoreo Vial con Inteligencia Artificial, que permitió supervisar el flujo vehicular en tiempo real, detectar desvíos y generar alertas preventivas. “Estamos en este momento constatando la utilidad del puente Churute. Está trabajando en doble sentido con la coordinación de la Policía Nacional. Estuvo operativo en el feriado, los cuatro días constantemente, las 24 horas”, afirmó Cristhian Villalba, representante del Gobierno Provincial.

Los viajeros que utilizan esta vía destacaron las medidas de seguridad y el buen estado de la infraestructura. “Me fui a Cuenca con mi familia a disfrutar del feriado. Es en la carretera, en estos lugares así que, cuando está solitario, saben suceder los incidentes; entonces, a mí me parece perfecto que esté la Policía controlando, más que nada en estos puntos así. El puente está habilitado”, comentó Isaac Baldeón, turista que transitaba por la zona.

Además, cumpliendo con la disposición de la prefecta Marcela Aguiñaga, no se cobró el peaje en ninguna de las estaciones de la red vial concesionada de la provincia, para incentivar la movilidad y la reactivación económica. Según la Dirección de Concesiones de la Prefectura del Guayas, alrededor de 720.000 vehículos pasaron gratuitamente, además de que los puestos de auxilio vial permanecieron operativos para brindar asistencia médica y mecánica durante las 24 horas del día a los viajeros.

Franklin Navarro viajó junto a su familia, desde el norte de Guayaquil hasta Samborondón y Salitre para hacer turismo interno. “Pensaba que nos íbamos a demorar, pero fue rápido porque los carros pasaban nomás, ya que las barreras de los peajes estaban levantadas”, comentó este hombre, quien viajó con su esposa, sus dos hijos y un nieto. El dinero que no gastó en el peaje lo destinó para consumir muchines y torrejas de maíz con queso, en la llamada La T de Las Maravillas. “Si el paso nos salió gratis, quisimos que esa platita se quede con la gente que depende del turismo”, contó orgulloso.

Por Yazmín Bustán

Feminista. Trabajando en visibilizar el trabajo que hacemos las mujeres,

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