Este 28 de mayo se conmemora el Día Internacional de Acción por la Salud de la Mujer, una fecha en la que se busca reivindicar el derecho de todas las mujeres a acceder sin restricciones a la salud, así como resaltar la importancia de la prevención para reducir la tasa de mortalidad femenina.
Según la Organización Mundial de la Salud, el cáncer de mama es la principal causa de muerte en mujeres, y se estima que una de cada 12 mujeres desarrollará esta enfermedad a lo largo de su vida. A nivel local, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos de Ecuador (INEC) registró un total de 3.056 casos de cáncer de mama en el país durante el año 2020, siendo el 98.3% de estos casos en mujeres.
La doctora Ana María Castillo, jefa de Radiología del Hospital de los Valles, enfatiza la importancia de realizar chequeos preventivos que incluyen estudios de imagen para detectar este tipo de cáncer, “es fundamental realizar la mamografía, la cual tiene alta sensibilidad y especificidad para detectar el cáncer de mama en etapas iniciales, y así poderlo tratar anticipadamente, antes de que este sea palpable o cause síntomas”.
La doctora explica que la mamografía es un estudio de tamizaje con una detección temprana en un rango del 90% o más. También señala que la mujer desde que inicia sus ciclos menstruales debe recibir atención ginecológica y programar chequeos de acuerdo con su grupo etario.
Si bien el autoexamen de mamas puede ayudar a las mujeres a familiarizarse con la apariencia y la sensación normal de sus senos, esta práctica solo permite detectar cambios inusuales y muy evidentes. “El cáncer de mama en las etapas iniciales es muy difícil de detectarlos solo palpándolo, por ello, es importante sumar al examen de mamografías regular y las consultas clínicas de los senos con un especialista”, agregó Castillo.
La detección temprana del cáncer de mama es fundamental para mejorar las tasas de supervivencia y los resultados del tratamiento en las mujeres. Por ello la jefa en radiología precisa ciertas recomendaciones para tener en cuenta:

  1. Examen clínico de senos: Se debe realizar al menos una vez al año. Durante esta revisión, un profesional de la salud capacitado examinará los senos y axilas en busca de cualquier anomalía.
  2. Mamografía: Esta es una prueba de detección que utiliza rayos X de baja dosis para detectar posibles tumores o masas en los senos. Es aconsejable que las mujeres se realicen este examen cada año, a partir de los 40 años.
  3. Autoexamen de senos: Se debe realizar regularmente el autoexamen de senos para detectar cualquier cambio o anomalía. Observar si hay bultos, hinchazón, enrojecimiento, cambios en la forma o el tamaño de los senos, secreción del pezón o cualquier otro cambio inusual.
  4. Evaluación de riesgos: Es importante evaluar los siguientes factores: antecedentes familiares de cáncer de mama, cambios genéticos hereditarios, edad, historial reproductivo y exposición a hormonas.
  5. Estilo de vida: Mantener una vida saludable para reducir el riesgo de desarrollar cáncer de mama. Esto incluye tener un peso saludable, hacer ejercicio regularmente, seguir una dieta equilibrada y limitar el consumo de alcohol.

La especialista insta a que, en este día de Acción por la Salud de las Mujeres, se priorice las acciones de prevención de cáncer de mama, enfermedad que persiste como una de las principales causas de mortalidad en las mujeres.

Por Yazmín Bustán

Feminista. Trabajando en visibilizar el trabajo que hacemos las mujeres,

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