- La avicultura representa el 24% del PIB agropecuario ecuatoriano y genera alrededor de 300 mil empleos directos1. En el Día Mundial de la Avicultura, Boehringer Ingelheim impulsa una visión preventiva para enfrentar los riesgos sanitarios del sector y preservar su sostenibilidad a largo plazo.
Boehringer Ingelheim hace un llamado a fortalecer las medidas de prevención sanitaria en el sector avícola, una industria estratégica para la economía, el empleo y la seguridad alimentaria del Ecuador.
En los últimos años, enfermedades como la influenza aviar han puesto en evidencia la vulnerabilidad de la producción avícola frente a amenazas sanitarias. Esta enfermedad viral altamente contagiosa afecta tanto a aves silvestres como domésticas, y puede propagarse con rapidez en criaderos y granjas, provocando graves pérdidas económicas. En 2022, el país reportó brotes que obligaron al sacrificio de más de 180.000 aves, impactando directamente la oferta nacional de proteína animal2.
El compromiso con la prevención no es solo una prioridad sanitaria, sino también una necesidad nacional. Según datos de CONAVE, Ecuador produce anualmente más de 500 mil toneladas de carne de pollo, más de 18 mil toneladas de carne de pavo, y más de 3.500 millones de huevos. Esta cadena agroalimentaria genera más de 4.000 millones de dólares al año, representando el 4% del PIB nacional y el 24% del PIB agropecuario. Además, el sector emplea a alrededor de 300 mil personas de forma directa, y garantiza acceso a proteínas de alto valor nutricional1.
El consumo per cápita también evidencia la relevancia del sector: en 2024, cada ecuatoriano consumió en promedio 28 kilogramos de carne de pollo y 207 huevos. Actualmente, el país cuenta con una población de 14 millones de gallinas ponedoras comerciales en producción1, lo que posiciona a la avicultura como un pilar fundamental para la salud alimentaria de la población.
“Proteger a las aves es proteger la nutrición de miles de familias. La prevención sanitaria en el sector avícola no puede esperar. Es momento de actuar con responsabilidad y visión de futuro”, señaló Nicole Menzel, Gerente Comercial y de Marketing en Salud Animal de Boehringer Ingelheim para Ecuador.
Volvac B.E.S.T. AI+ND®, una de las vacunas desarrolladas por la compañía, se presenta como una herramienta clave para enfrentar este desafío. Esta solución bivalente inactivada protege contra dos enfermedades altamente contagiosas: la influenza aviar y la enfermedad de Newcastle, ambas con gran impacto en la salud y productividad de las aves.
La Dra. Menzel explica que la vacunación debe aplicarse a gallinas ponedoras, reproductoras y pavos, con al menos dos a tres dosis, dependiendo del ciclo de producción. “Sabemos que muchas granjas de traspatio o informales no tienen aún acceso o conciencia sobre la importancia de la inmunización. Pero si no protegemos a todos los eslabones de la cadena, todos corremos el riesgo. La vacunación debe ser una prioridad nacional”.
¿Qué es la influenza aviar?
La influenza aviar es una enfermedad viral que se propaga rápidamente entre aves, a través del contacto con secreciones nasales, saliva o heces de animales infectados. Entre los signos clínicos más frecuentes se incluyen: aumento repentino de mortalidad, pérdida de apetito y de producción, huevos con cáscara blanda o deformes, dificultad respiratoria, coloración violácea en cresta y patas, diarrea, y posturas anormales.
Desde Boehringer Ingelheim, reiteramos nuestro compromiso con la salud animal y la seguridad alimentaria del Ecuador. Continuaremos trabajando junto a productores, médicos veterinarios, gremios y autoridades, promoviendo soluciones científicas, educación técnica y estrategias de prevención que garanticen una producción avícola sostenible, segura y resiliente.