El presidente de la República, Daniel Noboa Azin, mantuvo este 4 de septiembre una entrevista con Univisión. En ella trató la cooperación con Estados Unidos (EE. UU.), tras su reunión con el secretario de Estado de este país, Marco Rubio, así como la situación regional.
Sobre el primer tema, el Jefe de Estado resaltó que el punto más relevante de su encuentro fue que EE. UU. reconoció a los Lobos y a Los Choneros como grupos narcoterroristas. Explicó que estas organizaciones “forman parte de una estructura internacional que afecta a Estados Unidos, Europa y otras partes del mundo”.
Asimismo, expuso ante el delegado estadounidense un diagnóstico sobre las zonas más afectadas en Ecuador y las amenazas identificadas a mediano y largo plazo, con el objetivo de enfrentarlas en conjunto desde el inicio. En ese marco, explicó que el narcotráfico ha ampliado sus actividades y una de ellas es la minería ilegal, un delito que “está afectando la economía, los recursos naturales y las poblaciones en zonas apartadas en Ecuador, Colombia, Perú y Venezuela”.
Sobre este punto, el Presidente detalló que se mantienen conversaciones en las que EE. UU. ha manifestado su disposición de colaborar “en control fronterizo, trazabilidad del oro; y posiblemente, en un trabajo en conjunto, poder tener refinamiento local en Ecuador».
El Mandatario explicó que el oro se ha convertido en una de las principales herramientas de lavado de activos por su alta rentabilidad y liquidez, lo que exige mayor control. El propósito es cuidar el medio ambiente y el bienestar de la ciudadanía. Por ello, subrayó también la importancia de revisar las concesiones mineras actuales, gestionadas en el pasado, refiriéndose al caso de Quimsacocha: “hemos exigido a la empresa minera que demuestre con los más estrictos controles ambientales que no se va a afectar las fuentes de agua”, indicó, y advirtió que, caso contrario, las concesiones no serán aceptadas.
Otro tema abordado en la entrevista fue la posibilidad de que Ecuador coopere como país receptor de personas deportadas de EE. UU. El Jefe de Estado señaló que existe la disposición para apoyar, siempre que se trate de personas sin antecedentes de violencia. Aclaró que no se trata de un número alto y que, en caso de ser ciudadanos pacíficos que no puedan retornar a sus países de origen, Ecuador analizará su acogida.
Sobre la relación con países vecinos como México y Colombia, aseguró que Ecuador siempre estará abierto al diálogo con el propósito de mejorar la situación regional. “Debemos luchar en conjunto, no podemos estar separados”, dijo. Agregó que, “todas estas estructuras criminales, que también extienden sus tentáculos a empresarios, a la política y a la función judicial, se han permeado en la sociedad de cada país y se han vuelto muy difícil de combatir y erradicar”.
Respecto a la situación en Venezuela, el presidente Noboa recordó los informes de inteligencia que confirman las actividades al margen de la ley del cartel de los Soles y su relación con Nicolás Maduro. “Cada quien tiene su postura y yo puedo hablar por mi país y de cómo el narcoterrorismo nos ha afectado”, dijo, al referirse a la presencia de este grupo en la región. En ese sentido, valoró los esfuerzos de EE. UU.: “Me parece que lo que está haciendo EE. UU. es, por fin, atender un problema regional que tenemos. No son pandillas pequeñas, son grupos narcoterroristas altamente armados que mueven miles de toneladas de droga”, señaló.
Finalmente, sobre las relaciones comerciales de Ecuador, el Mandatario reiteró que Ecuador está abierto al mundo, indistintamente de las ideologías. En ese sentido destacó que el país registra un crecimiento del 4 % en el primer semestre y una proyección del 5 % en el segundo. Además, está en su punto más alto el empleo adecuado desde 2019, informó. Con ello, se prevé atracción de inversiones internacionales.
«Eso es una señal de que estamos nosotros no solo encargándonos de combatir a los narcoterroristas y la inseguridad, sino también cómo darles un desarrollo económico a las familias ecuatorianas», concluyó.