La Asociación “Semillas del progreso” conformada por mujeres del cantón Ventanas, provincia de Los Ríos, recibieron kits de siembra y capacitación técnica por parte de Agripac, con la finalidad de mejorar la productividad de sus parcelas mediante el uso de semilla de alto rendimiento e insumos respetuosos con el medio ambiente y la salud humana.
-Tradicionalmente, el campo en general y la agricultura en particular se han considerado asuntos de hombres, negando y minimizando el rol que han tenido desde siempre, y más en la actualidad, las mujeres rurales. Sin embargo, las mujeres son la columna vertebral de la economía rural, especialmente en los países en desarrollo, ya que ellas representan casi la mitad de los agricultores del mundo y, en las últimas décadas, han ampliado su participación en actividades agropecuarias.
En este sentido AGRIPAC, impulsa el proyecto “Orgullosas y Empoderadas”, mediante el cual se busca visibilizar la importancia de la mujer en la agricultura, reconociendo y valorando que ellas pueden convertirse en agentes de cambio en los ámbitos de la agricultura, la nutrición y el desarrollo rural.
“En AGRIPAC, con la colaboración de Inclusys, hemos desarrollado una investigación con mujeres del agro a través de 17 grupos focales en la Costa, Sierra y Amazonía, para comprender sus realidades y anhelos, e identificar cómo podemos atenderlas mejor. Para nosotros, las mujeres agricultoras son nuestras aliadas, las vemos, reconocemos y sentimos como son: ¡Orgullosas y Empoderadas!, por eso nos interesa su desarrollo y crecimiento, como personas y como productoras”, dijo Alexandra Armstrong, directora de Sostenibilidad de AGRIPAC.
El 27% de las unidades de producción agropecuaria en Ecuador tienen a una mujer como jefa de finca. Las mujeres participan en todas las labores agrícolas, siendo cada vez más las líderes que dirigen sus organizaciones y asociaciones, como es el caso de la agrupación “Semillas del Progreso”, en el recinto El Descanso del cantón Ventanas, Provincia de Los Ríos, en donde 32 participantes recibieron un kit de insumos y semillas de maíz amarillo de alto rendimiento junto con capacitación técnica, con el propósito de implementar parcelas demostrativas para fortalecer la productividad de sus cultivos, todo esto con el fin de apoyar a más mujeres líderes de Pymes agrícolas, fortaleciendo su economía familiar y, de esta manera, reducir la brecha de género existente en este sector económico en Ecuador.
“Las mujeres pueden dirigirse hacia un modelo de producción y consumo más sostenible, apalancadas en el acceso a la información, la capacitación en temas de rendimiento productivo y la tecnología», asegura Armstrong.
Las estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés) muestran que aproximadamente dos tercios de las mujeres representan una proporción sustancial de la fuerza de trabajo agrícola, como productoras de alimentos o trabajadoras agrícolas.