La propuesta de reformas que se busca aplicar al sistema de pensiones del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) ha generado incertidumbre en los afiliados. Así, uno de los cambios implicaría el aumento del número de años de aportaciones, se pasaría de 30 a 35 años.
Para los afiliados esta reforma no resulta aceptable, ya que eso retrasaría la edad para jubilarse, de 60 a 65 años.
Así, por ejemplo, Alina Ramírez es profesora en un colegio de Quito. Acumula 31 años de aportes al IESS y tiene 59 años de edad. Le faltaría apenas un año para jubilarse, con la normativa actual.
Pero si se aplicaran las reformas, planteadas por la comisión presidida por Augusto de la Torre, Alina debería esperar cuatro años más.
El costo de vida, comentó, es alto. Y el salario de los profesores no se ha incrementado. Ella espera que se mantenga el cálculo de la pensión con los cinco mejores sueldos del afiliado, y no como se quiere implementar. Se refiere a otra de las propuestas de la comisión de reformas: ese cálculo se haría con los 20 o 25 mejores años de ingresos de los afiliados.
Para esta maestra, el descontento ciudadano ante la reforma es general. De aprobarse el cambio podría provocar un estadillo social.
También está preocupado Ángel Vega, un empleado privado que está por cumplir 62 años. Y en octubre de 2023 completará los 30 años de aportaciones. Así que cuenta los meses para descansar y obtener su pensión.
Por eso no está de acuerdo con lo que plantea el gobierno. Cree que esa reforma es perjudicial para el resto de afiliados, que no están cerca de jubilarse. Además señaló: “el dinero que recibirá por los años de trabajo, no es garantía para poder vivir bien” debido a la mala atención hospitalaria que brinda el IESS.
Asimismo, Zoila Dávila es una jubilada, que trabajó 30 años. Cuenta que ella aportó al IESS, para acceder a la atención médica y a una jubilación justa. No esta de acuerdo con el aumento de años de aportes, ya que considera que todas las personas han trabajado para jubilarse en el tiempo que han proyectado. Dice que las nuevas generaciones ya no podrán acceder a la jubilación, de concretarse las reformas.
Fuente: Radio Pichincha